Cuando Antonio, tras años de duro trabajo y experiencia, fue nombrado supervisor en la cadena de montaje de su planta en Sabadell sintió la alegría propia de quien es  reconocido en su desempeño. ¡Por fin! Exclamó para sí. Pero horas más tarde, una vez superada su alegría inicial, tomó plena conciencia del desafío al que debía enfrentarse, ¿debería  adoptar  pose de jefe o, por el contrario, demostrar que seguía siendo uno más como hasta ahora?